La Compañía de Jesús adelanta la integración de las provincias españolas a 2014

estudiantes de la Universidad Loyola de Andalucía, de la Compañía de Jesús
estudiantes de la Universidad Loyola de Andalucía, de la Compañía de Jesús

Una de las obras jesuitas es la Universidad Loyola de Andalucía

F. OTERO | El pasado 28 de septiembre, la Compañía de Jesús en España anunció que se adelanta el proceso de integración de las cinco provincias, que será definitiva en 2014, cuando ya sea una realidad la nueva Provincia de España. Fueron los cinco provinciales de Aragón, Bética, Castilla, Loyola y Tarraconense, y el provincial de España, Francisco José Ruiz Pérez, los que propusieron al padre general, Adolfo Nicolás, la conveniencia de este adelanto.

Aceptada la propuesta, en estos dos años que restan se consolidarán las opciones tomadas hasta el momento y se dará espacio a muchas otras. En todos los casos, como apuntan todos los provinciales en un comunicado, “2014 tiene suficiente cercanía como para que podamos decirnos como jesuitas y como provincias que nuestro futuro común se convertirá ya dentro de poco en un presente habitado de nuestras vidas y nuestra vocación”.

Una decisión que, tal y como ha explicado a Vida Nueva Ruiz Pérez, permite “ver la salida a la enorme complejidad que es integrar cinco provincias, con sus más de mil jesuitas, varios miles de colaboradores laicos, numerosas comunidades y todavía más numerosas obras y presencias apostólicas”.

“Hemos decidido evitar una transitoriedad excesivamente larga, que dilate sin necesidad las decisiones y que agüe la novedad que representa constituir una Compañía de Jesús en España modulada como un cuerpo apostólico y comunitario común”, añade.

Según sostiene, esta integración “tiene parte de dismunición, pero también de recreación”, y estas “exigen actitudes distintas en quienes las protagonizan, sean personas o sean instituciones, las actitudes no nacen de la noche a la mañana”.

Francisco José Ruiz Pérez, provincial España Compañía de Jesús

El provincial de España, Francisco José Ruiz Pérez

“Cuando en 2010, nuestro padre general, Adolfo Nicolás, nos comunica a las provincias que íbamos a un horizonte compartido, mi sensación fue que iniciábamos un cierto éxodo con un motivo de fondo: amar desde ese momento a una Compañía de Jesús más pequeña, pero entrañablemente ignaciana, que sostuviera un servicio a la Iglesia en España con todo su caudal humano e institucional y en alianza con los laicos. Ese amor crece y, por eso, nuestro proceso de integración avisa de que es posible imaginar un final”, explica.

Son dos años y muchas tareas todavía por realizar. Por ejemplo, completar las transferencias de los sectores apostólicos a la jurisdición del provincial de España, pues faltan el apostolado social y la pastoral.

“Es necesario seguir dando forma al modo de articular localmente la vida comunitaria y la actividad apostólica, con el fin de que la Compañía del futuro no pierda inculturación y sensibilidad por los contextos en los que esté implantada”, afirma.

Pero un reto clave, concluye el provincial de España, será acelerar la formación en liderazgo: “Necesitamos jesuitas y laicos que sepan dejarse inspirar por el Espíritu, que lo disciernan juntos, que lo interpreten en proyectos de servicio a la Iglesia y que, con humildad, acepten que los resultados solo son de Dios”.

Una misión global

El proyecto de integración de la Compañía de Jesús comenzó en noviembre de 2008 con el visto bueno del padre general, Adolfo Nicolás, a la propuesta presentada por el entonces provincial de España, Elías Royón, a la que se había llegado tras constatar, en aquel momento, que “la colaboración integrada actual no es ya suficiente para desarrollar un plan apostólico que responda a las necesidades locales, regionales y universales”.

Una unión que el propio Nicolás calificó como una oportunidad para ofrecer “el mayor y mejor servicio a la Iglesia y a la sociedad”. La primera etapa estuvo centrada en los trabajos de una comisión de Gobierno y otra de Planificación Apostólica; y la segunda, en la que están actualmente, trabaja en la transición hacia un proyecto apostólico único.

Así, desde 2010 se han ido transfiriendo al provincial de España diversos sectores apostólicos. Por ejemplo, en septiembre del año pasado, fue transferido el de Educación y el subsector de Pastoral Juvenil y Colegial, y este pasado septiembre el sector de la Educación Universitaria.

En el nº 2.819 de Vida Nueva.

Compartir