La Jornada se celebra el 21 de octubre bajo el lema ‘Misioneros de la fe’
M. GÓMEZ | El Domund 2012 se enmarca en el contexto de la celebración del 50º aniversario del comienzo del Concilio Vaticano II, la apertura del Año de la Fe y el Sínodo de los Obispos sobre la Nueva Evangelización, unas conmemoraciones que son “ocasiones propicias para un nuevo impulso de la cooperación misionera”. Así lo asegura el papa Benedicto XVI en su mensaje para la Jornada, que tendrá lugar el domingo 21 de octubre. En España, las OMP abordan el trabajo del misionero en un vídeo a modo de ficción.
Estas efemérides “contribuyen a reafirmar la voluntad de la Iglesia de comprometerse con más valor y celo en la misión ad gentes, para que el Evangelio llegue hasta los confines de la tierra”, señala el Papa.
Asegura Benedicto XVI que “la misión ad gentes debe ser el horizonte constante y el paradigma en todas las actividades eclesiales” (…). Como Pablo, debemos dirigirnos hacia los que están lejos, aquellos que no conocen todavía a Cristo y no han experimentado aún la paternidad de Dios”.
Frente a obstáculos como la crisis de fe en el mundo actual, el Pontífice exhorta a los cristianos “renovar el entusiasmo de comunicar la fe para promover una nueva evangelización de las comunidades y de los países de antigua tradición cristiana, que están perdiendo la referencia de Dios, de forma que se pueda redescubrir la alegría de creer”.
Igualmente, invita a “retomar el mismo fervor apostólico de las primeras comunidades cristianas” para difundir el Evangelio en todo el mundo, un encargo que se realiza a todos los estamentos de la Iglesia, sacerdotes, diáconos, religiosos, religiosas y laicos, pero especialmente los obispos, pastores y “primeros responsables de la evangelización del mundo”, señala el mensaje.
La importancia de este mandato misionero obliga a “adecuar constantemente estilos de vida, planes pastorales y organizaciones diocesanas a esta dimensión fundamental de ser Iglesia”, algo que vale también para los institutos religiosos y los movimientos eclesiales: “Todos los componentes del gran mosaico de la Iglesia deben sentirse fuertemente interpelados por el mandamiento del Señor de predicar el Evangelio”.
La fe, verdadera razón del misionero
La convocatoria del Año de la fe (del 11 de octubre de 2012 al 24 de noviembre de 2013) es lo que ha inspirado el lema de Obras Misionales Pontificias (OMP) en España: Misioneros de la fe.
Este es “el mejor título que puede otorgarse a un misionero”, apunta en su mensaje Anastasio Gil, director nacional de OMP, advirtiendo de un riesgo: “Las situaciones dramáticas de pobreza, enfermedad, confrontaciones bélicas, etc., con las que los misioneros se tienen que enfrentar en cada momento hacen que estas atenciones humanitarias y evangélicas puedan empañar la verdadera y genuina razón de su presencia en los territorios de misión: comunicar la fe, en la certeza de que esta ‘se fortalece dándola'”.
“Comunicar la fe no es solo dar a conocer una persona o un mensaje, sino también y, a la vez, llamar al asentimiento. Esta llamada del misionero, que respeta la libertad de cada persona y las etapas de la conversión, tiene siempre en cuenta que ‘la fe nace del mensaje que se escucha’ (Rom 10,17), porque ‘es la Palabra oída la que invita a creer’ (EN 42)”, añade el sacerdote.
Para reforzar esta idea, las OMP España han difundido un vídeo de apoyo a la campaña del Domund, titulado ‘El misionero responde’: en formato de ficción, un misionero recién llegado de la India, donde ha salvado a 31 niñas huérfanas de morir en unas inundaciones, da cuenta a los periodistas no solo de su labor, sino también del sentido de su trabajo.
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