El arzobispo de Santa Fe fue recibido al día siguiente de su elección por la presidenta
WASHINGTON URANGA. BUENOS AIRES | En el transcurso de su Asamblea Plenaria –celebrada durante la segunda semana de noviembre en la localidad de Pilar, cercana a Buenos Aires–, más de un centenar de obispos eligieron al arzobispo de Santa Fe, José María Arancedo, como nuevo presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) para los próximos tres años, cargo en el que sucede al cardenal Jorge Mario Bergoglio, quien cumplió dos períodos al frente del Episcopado y, estatutariamente, no podía acceder a un nuevo mandato.
Arancedo estará acompañado en la vicepresidencia primera por Virginio Bressanelli, nombrado obispo de Neuquén el mismo día en que se concretó su elección en el seno de la CEA, y en la vicepresidencia segunda por Mario Cargniello, arzobispo de Salta. En la secretaría general, los obispos reeligieron a Enrique Eguía Seguí, obispo auxiliar de Buenos Aires.
Con la elección de Arancedo, los obispos confiaron la cabeza visible del Episcopado a un hombre a quien, en general, se le conoce como “dialogante”, algo que los medios de comunicación del país destacaron por oposición al cardenal Bergoglio, quien, durante dos períodos, mantuvo una tensa relación con los gobiernos de Néstor Kirchner y de la actual presidenta recién reelegida, Cristina Fernández de Kirchner.
Arancedo, nuevo presidente del Episcopado argentino, con la presidenta Cristina Fernández
Al respecto, el propio Arancedo explicó que “tal vez [los medios] me ponderaron demasiado, pero creo que soy dialoguista, aunque tengo días en los que no dialogo tanto”. El arzobispo se considera marcado por “la figura de Pablo VI y sus encíclicas –con sus imágenes de diálogo y evangelización– Ecclesiam Suam y después Evangelii Nuntiandi como una clave para interpretar el Concilio”.
Pero, más allá de palabras, fueron los gestos de diálogo y acercamiento entre Episcopado y Gobierno los que se sucedieron desde el momento de su elección. Ese día, Arancedo y los miembros de la Comisión Ejecutiva solicitaron una entrevista a la presidenta del país. Su petición obtuvo respuesta al día siguiente, y el encuentro en la Casa Rosada, sede del Ejecutivo, se produjo el jueves 10 de noviembre por la tarde, cuando ni siquiera los prelados habían asumido formalmente sus cargos.
Los participantes en la reunión (por el Gobierno, además de la presidenta, estuvieron el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, el canciller Héctor Timerman y el secretario de Culto, Guillermo Olivieri; y por el Episcopado, los integrantes de la Comisión Ejecutiva) coincidieron en calificarla de “protocolaria”, pero “muy cordial”.
El vocero episcopal, Jorge Oesterheld, desveló que fue una reunión “grata” y “muy amable y distendida”, en la que se abordó la situación de la Iglesia y el país, pero a nivel general. También Arancedo reconoció que el encuentro con la presidenta “fue muy cordial”, y “lo agradecemos –dijo–, porque, a las pocas horas de pedirle la reunión, ella inmediatamente nos dio la audiencia”.
La nueva presidencia de la Conferencia Episcopal Argentina: Enrique Eguía, Bressanelli, Arancedo y Cargniello
Según el presidente de la CEA, “fue una larga charla, muy distendida, muy útil para las relaciones Iglesia-Gobierno”. Y precisó: “Le dijimos que ‘somos pastores’, por lo tanto, los temas que tocamos no son desde una óptica político-partidaria, opositora u oficialista, sino desde nosotros, como pastores, con fidelidad al Evangelio y al servicio del hombre”.
En declaraciones tras la elección de Arancedo, el cardenal Bergoglio aseguró que durante sus seis años como presidente de la CEA vivió “la unidad y la fraternidad que hay entre nosotros [los obispos], y eso lo vivo desde el año 92 que entré al Episcopado”.
Renovación en Comisiones
La Asamblea renovó también autoridades en las 19 comisiones de la CEA. Entre las designaciones más importantes, cabe destacar:
- Jorge Lozano, obispo de Gualeguaychú: nuevo presidente de Pastoral Social.
- Óscar Ojea, coadjutor de San Isidro: titular de Cáritas.
- Andrés Stanovnik, arzobispo de Corrientes: Apostolado Laico y Pastoral de la Familia.
- Héctor Ager, arzobispo de La Plata: Educación Católica (reelección).
- Agustín Radrizzani, arzobispo de Luján-Mercedes: Comunicación Social (reelección).
- Sergio Fenoy, obispo de San Miguel: Fe y Cultura.
- Mario Poli, obispo de Santa Rosa: Catequesis y Pastoral Bíblica.
- Carlos Franzini, obispo de Rafaela: Vida Consagrada.
En el nº 2.777 de Vida Nueva.
