Domund 2011: la crisis económica no merma la solidaridad con las misiones

España es el segundo país que más contribuye a esta Jornada

M. Á. MALAVIA | Las Obras Misionales Pontificias (OMP) agradecen a España el “esfuerzo verdaderamente grande” por su aportación de unos 17 millones de euros en la colecta para las misiones relativa a 2010. Una cifra, similar a la reunida en los últimos años, que convierte a nuestro país en el segundo contribuyente del mundo, solo por detrás de los Estados Unidos. Algo que, a juicio de Piergiuseppe Vacchelli, presidente de las OMP y secretario adjunto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, merece una especial consideración por darse en un contexto de “grave crisis económica”.

Anastasio Gil, nuevo director de las OMP en España, destacó esta valoración positiva recibida desde la Santa Sede –y que le llegó a través de una carta– en la presentación, el pasado día 18, de la Jornada Mundial de las Misiones (Domund), que se celebra este domingo 23. En rueda de prensa, Gil dio a conocer el lema de la que será 85ª edición del Domund –Así os envío–, a la vez que cifró en 15.000 el número de misioneros españoles repartidos por todo el mundo.

Como apuntó Gil, los objetivos de todos los misioneros son esencialmente tres: la lucha comprometida por erradicar la pobreza, promover la dignidad de las personas y ser testigos de la fe a través del anuncio del Evangelio. Relativo a los dos primeros fines, explicó que las OMP han enviado este año casi 4 millones de dólares para paliar las consecuencias de la hambruna en el Cuerno de África.

Respecto al último fin, el director de las OMP en España hizo hincapié en que, a veces, el compromiso por la evangelización puede llevar al martirio. Y es que, remarcó, “cada cinco minutos es asesinado un cristiano en el mundo y, al año, lo son entre 40 y 50 misioneros”. Por todo ello, pidió que el espíritu del Domund no se limite a una colecta, sino que sea una vocación permanente.

En el nº 2.773 de Vida Nueva.

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