Frente al fundamentalismo, más razones que agresiones

Según los obispos, junto al secularismo, es el gran reto de los cristianos asiáticos

Un templo cristiano en Indonesia tras sufrir un atentado

MIGUEL ÁNGEL MALAVIA | Contra el fundamentalismo anticatólico, que cada vez es más patente en muchos países de Asia, la receta es “no responder con agresividad”, sino “indagando y comprendiendo las razones psicológicas y sociales que permiten su florecimiento”. Así lo afirma el arzobispo de Guwahati (India), Thomas Menamparampil. El también presidente del Departamento de Evangelización de la Federación de Conferencias Episcopales de Asia (FABC) explicó así algunas de las conclusiones a las que llegaron los miembros de este organismo –conformado por cuatro prelados, provenientes de Tailandia, Filipinas, Vietnam y Pakistán–, reunidos recientemente en el Centro Redentorista de Pattaya (Tailandia) para abordar el tema Secularismo, fundamentalismo y evangelización.

Como explica Menamparampil en declaraciones a la Agencia Fides, los participantes en el encuentro coincidieron en destacar que “el fundamentalismo y la secularización constituyen los dos mayores retos de la evangelización en Asia”.

Respecto al primero, los pastores denuncian que este fenómeno está creciendo con fuerza en el ámbito del islam y el hinduismo, con graves consecuencias que “turban la armonía social y religiosa”, puesto que “explotan las emociones y las necesidades de la gente”. Del mismo modo, apuntan que este radicalismo también se da en el seno del cristianismo; en este sentido, advierten que resultan preocupantes los métodos con los que el pentecostalismo atrae a fieles de la propia Iglesia católica.

A propósito de la secularización, el prelado indio desvela que, para sus trabajos, tomaron como referencia las tesis del ensayista inglés Steven Bruce, que entiende que es “un fenómeno irreversible de la era moderna”. Algo que los representantes de la FABC constatan en Asia “especialmente entre los jóvenes y las familias”.

Así las cosas, ¿cómo se puede hacer frente a los desafíos que plantean tanto el secularismo como el fundamentalismo en un contexto en el que se quiere fomentar la evangelización? Menamparampil ofrece una doble respuesta: “A la secularización hay que oponerse contribuyendo a la construcción de valores laicos universalmente válidos. La respuesta al fundamentalismo es, en cambio, la auténtica religión”.

A pesar de la grave situación de indefensión que sufre la minoría cristiana en Asia, el arzobispo de Guwahati ve en ella una gran oportunidad: “Cuando surgen dificultades es cuando la gente busca respuestas. Y cuando los problemas son intensos, las preguntas se hacen más profundas. Quizá sea este el momento que está atravesando hoy Asia”, reconoce.

Finalmente, ante los múltiples problemas que sufren sus comunidades, lanza un reto en positivo: “Que los anunciadores de la Palabra en Asia sepan hacerse escuchar, porque la tierra tiene sed del mensaje de amor, justicia, paz y rectitud que Cristo predicó”.

En el nº 2.772 de Vida Nueva.

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