JOSÉ RAMÓN NAVARRO PAREJA. VALENCIA | El sociólogo y jesuita valenciano Vicente Sastre García falleció en Valencia el pasado 14 de junio, a los 80 años de edad, tras una larga enfermedad. Hasta el momento de su muerte, Sastre mantenía una destacable tarea pastoral en la archidiócesis de Valencia, en la que era presidente de la Comisión de Turismo y Tiempo libre desde 1997 y de la Comisión de Relaciones Interconfesionales desde 1999.
Erudito, humanista, elocuente, siempre socarrón y pegado al tabaco de liar que fumaba, sus amigos destacan de él su disposición a “tender la mano” a quien necesitara de su ayuda. De hecho, el arzobispo de Valencia, Carlos Osoro, puso de relieve en su funeral esa “manera de ser que hacía que la persona que permaneciera a su lado encontrara paz, serenidad y soluciones a sus problemas”.
Vicente Sastre había nacido en Mislata (Valencia) en 1931. Hijo de profesor, creció en un entorno marcado por los libros y la cultura. A los 18 años, ingresó en la Compañía de Jesús y fue ordenado sacerdote en 1962. Estudió Sociología en la Universidad de la Sorbona en París, completando sus estudios con las licenciaturas de Ciencias de la Educación, Filosofía y Teología.
Encuesta al clero
Uno de sus trabajos más significativos fue la encuesta al clero que sirvió como documento de debate en la I Asamblea conjunta de obispos y sacerdotes en Madrid, de la que ahora se cumple el cuadragésimo aniversario. Por encargo de la Comisión Episcopal para el Clero, Sastre realizó, junto a su equipo, el Informe socio-religioso del clero español en 1971, que desgranaba las diferencias entre el episcopado más afecto al régimen y una buena parte de los sacerdotes. Sastre también elaboró estudios similares para algunas diócesis, como la de Sevilla.
En 1983 creó el Instituto de Ciencias e Investigaciones Sociológicas (INCIS). Desde él realizó trabajos como el completo análisis sociológico de la diócesis de Valencia, en 2002, que sirvió como base para los posteriores programas pastorales.
En el campo del ecumenismo, Vicente Sastre fue el dinamizador de las Semanas para la Unidad de los Cristianos en Valencia, así como de numerosos actos de encuentro y actividades entre las distintas confesiones. También promovió la construcción de un gran complejo ecuménico en Oliva, que finalmente no pudo llevarse a cabo por discrepancias con el Ayuntamiento.
En el nº 2.759 de Vida Nueva.
