La bondad de un gesto

Marcar la casilla de la Iglesia en la Declaración de la Renta porque es muy rentable para la sociedad

Fernando G. Barriocanal, el obispo Algora e Isidro Catela, en la presentación de la campaña

FRAN OTERO | Los obispos, vistos los resultados que han cosechado a pesar de la crisis las últimas campañas de publicidad, han decidido seguir haciendo esfuerzos en este sentido y, un año más, aunque de modo más austero, han lanzado una no menos ambiciosa campaña para que cada vez más contribuyentes marquen la casilla de la Iglesia católica en su declaración de la renta.

Como dijo en rueda de prensa el vicesecretario de Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Fernando Giménez Barriocanal, cuando comenzaron con estas campañas temían que les acusaran de malgastar el dinero de los pobres, hasta que vieron “la bondad de tener campañas así”.

Por eso, la CEE pone la carne en el asador de los medios tradicionales y de los que están más en boga. Está en Internet (redes sociales, páginas web…), en prensa, radio, televisión y vallas. Una campaña que alcanza ahora su máxima expresión –y continuará así hasta finales de junio– con anuncios publicitarios en las principales televisiones del país, con inserciones en prensa y con cuñas radiofónicas, pero que ya había comenzado días atrás con la difusión de un vídeo informativo a través de Internet.

La campaña episcopal también hará acto de presencia en las principales ciudades españolas a través 1.250 vallas publicitarias, y en diarios y parroquias con el encarte y la  distribución del periódico Xtantos, que incluye noticias, opinión, entrevistas y reportajes sobre el sostenimiento de la Iglesia. Nueva campaña, y el Episcopado insiste en el mensaje: “Marca la X de la Iglesia en la Declaración de la Renta. Ayúdanos para seguir ayudando”.

Cartel de la campaña de la renta 2011

Recalcan también que hacerlo no cuesta más, ni hace que devuelva menos; y que es compatible con la casilla de fines sociales, y retoman la urgencia de contar qué hace la Iglesia por la sociedad. “La Iglesia aporta mucho más de lo que recibe”, explicó Giménez Barriocanal, que considera que no se “ha tocado techo” en cuanto a asignaciones. “En épocas de crisis, la gente se da cuenta de a dónde tiene que ir el dinero”, apostilla.

En definitiva, se trata de dar una imagen real de la Iglesia, ante la desinformación que existe al respecto, según sostuvo el obispo de Ciudad Real y responsable del Secretariado para el Sostenimiento de la Iglesia, Antonio Algora.

Aumentan las declaraciones a favor  de la Iglesia

Por el momento, este mensaje no ha ido nada mal y las campañas, por lo tanto, han dado su fruto; hasta el punto de que, a pesar de la crisis económica, las asignaciones en favor de la Iglesia aumentaron –hubo cerca de 66.000 más– y solamente se dejaron de ingresar tres millones de euros con respecto al ejercicio anterior. La recaudación ascendió a unos nada desdeñables 250 millones de euros.

Para Algora, dotar de estos fondos a la Iglesia es rentable para la sociedad, aunque reconoce que es muy complicado “medir la profundidad de la ayuda que la Iglesia, hombres y mujeres de fe, hacen en esta época de crisis”. Valora, además, que las personas confíen parte de lo que pagan de impuestos a la Iglesia y, por ello, reivindicó que todo lo que esta recibe “es de las personas”.

Tras afirmar que “los cristianos saben comprometerse con ayudas rentables”, se preguntó si es rentable formar a niños para la Primera Comunión. La respuesta, en forma de pregunta, llamó la atención y, por ello, circuló por las radios y prensa de nuestro país: “¿Qué sería de este país si la mayoría de los niños no hiciera la Primera Comunión? ¿Influye o no influye en el comportamiento de los niños, en el rendimiento…?”. En cualquier caso, dejó claro que la implicación y el compromiso cristiano provoca, por ejemplo, que desciendan las colectas para la parroquia, pero suban las que se destinan a Cáritas.

El precio de la campaña

Para concluir, Barriocanal abordó algunos asuntos como el precio de la campaña, que evitó ofrecer, porque lo hará junto con los resultados económicos de la misma, su rentabilidad. Además, reconoció que colaboran con la plataforma de las ONG en el fomento de que se marquen las dos X, o las conversaciones con la Agencia Tributaria para mejorar los mecanismos de asignación.

El último mensaje que envió fue para aclarar que la CEE no ha utilizado el dinero de la asignación para convertirse en accionista mayoritaria de la cadena católica de televisión 13TV y, de paso, reivindicar que una institución como la Iglesia pueda disponer de una televisión.

En el nº 2.754 de Vida Nueva.

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