Estadística

CHEMA CABALLERO | Misionero javeriano en Sierra Leona

“Este nuevo escenario que se vive en África no está dando lugar a la creación de empleo ni a un afloramiento de la economía informal. Lo lógico sería que todo este crecimiento económico tuviera un impacto positivo en la reducción de la pobreza, y, sin embargo, no es así”.

Las últimas estadísticas muestran que la mayoría de los países del África subsahariana están experimentando un fuerte crecimiento económico, de una media del 7 u 8%. Además, estos países han atraído mucha inversión directa extranjera.

Al mismo tiempo, aparecen estadísticas que muestran que la venta de automóviles, frigoríficos, lavadoras y otros bienes se ha disparado en los últimos años en el continente. De estas cifras, los analistas concluyen que la clase media está creciendo en África. Según todo indica, se trataría de personas que han salido de la pobreza y han conseguido un nivel de renta que les permite acceder a cierto nivel de consumo y bienestar.

Pero, curiosamente, las mismas estadísticas demuestran que este nuevo escenario que se vive en África no está dando lugar a la creación de empleo ni a un afloramiento de la economía informal. Lo lógico sería que todo este crecimiento económico tuviera un impacto positivo en la reducción de la pobreza, y, sin embargo, no es así. Es más, en muchas regiones africanas, esta sigue creciendo.

Los analistas culpan de este extraño fenómeno a las guerras que muchos de los países del continente han sufrido desde su independencia, o al cambio climático. Sea cual sea la causa, lo cierto es que la brecha entre ricos y pobres es cada día más grande en África y el número de los desposeídos no deja de aumentar.

Por eso, cada vez estoy más convencido de que los ciudadanos de África subsahariana no pueden perder más tiempo y tienen que dar inicio a la revolución que propicie el cambio que tanto anhelan. Mientras Occidente siga marcándoles el camino a seguir y tutelándoles el futuro, todo continuará igual y la riqueza que se produzca en el continente solo favorecerá al Norte.

En el nº 2.753 de Vida Nueva.

Compartir