La novela de la semana es de Emmanuel Carrère (Anagrama, 2010). La recensión es de Juan Carlos Rodríguez.
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De vidas ajenas
Autor: Emmanuel Carrère
Editorial: Anagrama
Ciudad: Barcelona
Páginas: 264
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JUAN CARLOS RODRÍGUEZ | Emmanuel Carrère (París, 1957) es, desde la publicación de El adversario, en 1999, un referente ineludible de la nueva literatura francesa. Tan imprescindible como silencioso, siempre profundo y con una injusta etiqueta de “morboso”, que por fin logra quitarse de encima.
Lo hace, precisamente, con esta novela, sobrecogedora, imposible de abandonar, pero hermosamente esperanzadora. Y esto que, aparentemente, no lo tendría que ser, dado que narra su experiencia ante dos muertes cercanas en la vida del propio Carrère: una niña de cinco años, fallecida en Sri Lanka a causa del tsunami de 2004, y la cuñada del propio escritor, Juliette, joven, juez de profesión, enferma de cáncer.
La muerte, la enfermedad, el dolor fluyen por esta sorprendente novela de no ficción, que está lejos de ser un libro siniestro, porque es una obra acerca del amor, de la amistad, del valor, el coraje y la vitalidad; también de la justicia. Todo está en el personaje de Étienne Rigal, juez y amigo de Juliette, y su visión de la vida.
En el nº 2.753 de Vida Nueva.
