El largo camino de la renovación de los legionarios

(María Gómez) Han pasado seis meses desde que Velasio de Paolis fuera nombrado delegado pontificio para la Legión de Cristo, para gobernar la congregación durante el período que ésta necesite para revisar su carisma y renovarse entera, en realidad. El último paso –hasta ahora– en este largo camino de renovación, son las nuevas disposiciones sobre cómo los legionarios han de tratar a partir de ahora al fundador. Entre otras cosas, el P. Maciel ya no es ‘Nuestro Padre’.

De Paolis se ha dirigido personalmente a los legionarios a través de tres cartas: el 10 de julio, al día siguiente de conocerse su designación (realizada por Benedicto XVI en una carta del 16 de junio); el 19 de octubre, la más larga y que mejor aterriza las cuestiones pendientes; y el 10 de diciembre, con motivo de la Navidad y Año Nuevo.

Todos estos textos (y algún otro también reciente) insisten en ciertas expresiones clave: el proceso para la renovación es un camino“necesario y urgente” que “se prevé largo”, que ha recorrerse “con humildad y fe”, de forma “individual y comunitaria”, porque éste es un reto en el que deben involucrarse todos los legionarios.

La meta: un Capítulo General Extraordinario para aprobar unas Constituciones a las que, posteriormente, dará su visto bueno la Santa Sede. [Seguir leyendo]

En el nº 2.734 de Vida Nueva.

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