Sistach: “Espero que pronto podamos reunirnos en la Sagrada Familia para la beatificación de Gaudí”

El cardenal arzobispo de Barcelona habla con ‘Vida Nueva’ de la próxima visita del Papa

(Vida Nueva) Será el 7 de noviembre cuando Benedicto XVI, procedente de Santiago de Compostela, llegue a Barcelona para bendecir uno de los templos más modernos del mundo, la Sagrada Familia, obra del arquitecto Antonio Gaudí. Uno de los convencidos de la importancia de este templo y de su significación catequética y teológica es su cardenal arzobispo, Lluís Martínez Sistach, quien, en conversación con el director de Vida Nueva, Juan Rubio, habla de algunos detalles del viaje y de su importancia.

Martínez Sistach asegura que los barceloneses esperan mucho esta visita, veintiocho años después de la que realizó Juan Pablo II: “Esperamos que nos dé renovado coraje e ilusión para vivir la vida cristiana en el seno de la Iglesia y en la sociedad con fidelidad y generosidad, con acción y oración, con coherencia entre la fe y la vida, y con un espíritu misionero y evangelizador”.

Sobre las particularidades de la Sagrada Familia, el cardenal afirma que “Gaudí proyectó el templo como lo que tiene que ser una iglesia: casa de Dios y de la comunidad, para la celebración del culto, especialmente la eucaristía. El sueño de este ‘arquitecto de Dios’ era representar la Jerusalén celestial, la ciudad nueva y santa”.

Una visita justificada

Una concepción teológica que, según Sistach, “coincide con la que tiene el Papa”. Esto, unido al hecho de que Gaudí tiene en curso su causa de canonización, movieron al arzobispo de Barcelona  “a invitar al Santo Padre para que presidiera la dedicación del templo de la Sagrada Familia, y han hecho posible que lo aceptara”.

Sobre el proceso de beatificación del arquitecto, Martínez Sistach añade que “falta completar la positio, pero especialmente que Dios haga por su intercesión un milagro. Espero que pronto podamos reunirnos en lo que será, a partir del día 7 de noviembre, la Basílica de la Sagrada Familia para poder celebrar solemnemente su beatificación”.

Más información en el nº 2.724 de Vida Nueva.

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