Obispos españoles y franceses destacan que es un lugar privilegiado de evangelización
(José Ramón Amor Pan) El Seminario Mayor de Compostela acogió los días 19 y 20 el II Encuentro de Obispos Españoles y Franceses del Camino de Santiago, a invitación del arzobispo compostelano, Julián Barrio, y con motivo del Año Santo Jacobeo. Este encuentro se celebra en continuidad del celebrado en Roncesvalles el 4 de mayo de 2009.
Los prelados subrayaron la importancia de una pastoral común para los Caminos de Santiago, con el fin de dinamizar la dimensión espiritual de unas vías de peregrinación consideradas como un lugar privilegiado de evangelización. El cardenal Jean Pierre Ricard, arzobispo de Burdeos, pidió “que el Señor, por la intercesión de Santiago, nos conceda la audacia del testimonio. Que conceda a nuestra Iglesia esta pasión por abrir caminos nuevos al Evangelio. En un mundo marcado por la desilusión, el cinismo, la búsqueda del beneficio a cualquier precio y por el repliegue individualista sobre los propios intereses, no tengamos miedo de mostrar que sólo el amor es digno de fe, que sólo el amor, tal como es revelado por Jesucristo, salva el mundo. Que sólo este amor cura el corazón del hombre. No tengamos miedo de enfrentarnos con las bromas, el escarnio o la oposición frontal al mensaje evangélico. Que nuestra oración sobre la tumba del Apóstol Santiago renueve en nosotros el ánimo y el ardor de los primeros apóstoles”.
Preocupación de Barrio
Días antes, Barrio mantuvo un encuentro privado con algunos medios, Vida Nueva entre ellos. En él expresó su preocupación por el tratamiento mediático que se estaba dando a la próxima visita papal y, en general, a la dimensión religiosa del Año Santo y del Camino, al tiempo que animaba a tratar de revertir esa imagen para que la opinión pública tuviese una idea más fidedigna de los acontecimientos y, con ello, captase su relevancia y trascendencia.
El ambiente de esta reunión fue muy grato, con un denominador común: el agradecimiento a Julián Barrio por haber tenido esta iniciativa y el compromiso unánime por responder al llamamiento del prelado.
En el nº 2.717 de Vida Nueva.
