(M. Á. Malavia) “Tan sólo con una gran emoción y respeto nos podemos acercar a este mártir de Cristo. Y, en ocasión de su beatificación, debemos celebrarla procurando tener el mismo espíritu de perdón y de reconciliación que él testimonió a lo largo de toda su vida y, de forma especial, en el momento de morir. Que él, desde el cielo, nos ayude a vivirlo así, ahora y aquí, a fin de que aquella tragedia entre hermanos nunca se vuelva a repetir”. Con estas interpelantes palabras, el cardenal de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, en misiva a los fieles, ha puesto el foco de atención de toda la diócesis en la ceremonia de beatificación que el sábado 23, en Mataró, ascenderá a los altares a Josep Samsó Elias.
Éste nació en Castellbisbal (Barcelona, 1887), ordenándose sacerdote diocesano en 1910. Nueve años después, llegaría a la parroquia de Santa María, en Mataró, convirtiéndose en su párroco en 1924 y ganándose fama de excelente catequista. Con el estallido de la Guerra Civil, fue encarcelado y, el 1 de septiembre de 1939, ejecutado, no sin antes querer abrazar, como signo de amor y perdón, a los miembros del pelotón de fusilamiento.
Para la ceremonia, que tendrá lugar en la misma basílica de Santa María, se espera una afluencia masiva de fieles de toda Cataluña, al ser la primera beatificación que tiene lugar en la archidiócesis de Barcelona en toda su historia. Presidirá los actos el cardenal Sistach, quien será acompañado de una veintena de obispos. También estarán el nuncio papal, Renzo Fratini, y el prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, Angelo Amato.
A lo largo del año, nuestro país celebrará otras beatificaciones: la del sacerdote jesuita del siglo XVIII Bernardo Hoyos (el 18 de abril, en Valladolid), la del sacerdote catalán del siglo XIX y fundador de las Capuchinas de la Madre del Divino Pastor José Tous y Soler (el 24 de abril, en Barcelona) y la del fraile capuchino del pasado siglo Leopoldo de Alpandeire (el 12 de septiembre, en Granada). Aún sin fecha confirmada, pero que podría tener lugar en los próximos meses, también estaría la ascensión a los altares del periodista Manuel Garrido Lozano ‘Lolo’, en Linares (Jaén).
En el nº 2.692 de Vida Nueva.
