En el mundo sufren por su fe 350 millones de cristianos

Según El Informe sobre Libertad Religiosa 2008 de AIN, las situaciones de intolerancia evolucionan “a peor”

(Miguel Ángel Malavia) El pasado 23 de octubre se presentó en Madrid el Informe sobre la Libertad Religiosa en el Mundo 2008, editado por Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) y por primera vez traducido al castellano, junto a otros seis idiomas. El acto de presentación contó con la presencia del director de AIN-España, Javier Menéndez Ros, y el religioso padre blanco Justo Lacunza Balda, quien fue durante seis años rector del Pontificio Instituto de Estudios Árabes e Islámicos. 

El informe de AIN destaca por ser una herramienta de documentación detallada y exhaustiva, recogiendo todo tipo de datos y estadísticas sobre la situación del derecho a la libertad religiosa en el mundo, siendo, además, “el único realizado por una entidad específicamente católica y dependiente de la Santa Sede”, como destacó Menéndez Ros. El de 2008 ha extendido su análisis a un total de 190 países. De ellos, en cerca de 60 se vulnera actualmente la libertad de conciencia, según el estudio. Profundizando en las cifras, el director de AIN-España aseguró que hoy son un total de 350 millones los cristianos que sufren por su fe. De ellos, 200 millones padecen una persecución directa y declarada, viviendo el resto en contextos en los que, por el hecho de declararse cristianos, sufren merma en sus derechos como ciudadanos. 

Menéndez Ros aclaró que “los grados de restricciones son muy diversos”, en función de las leyes, costumbres, culturas y sistemas políticos dominantes en los distintos ámbitos. Cuestionado sobre si la situación ha mejorado respecto a años anteriores, el director de la institución fue claro: “Ya nos gustaría decir que sí, pero, por desgracia, la realidad es que la evolución es a peor. Hoy vivimos una oleada de fundamentalismo e intolerancia en muchos países, constatándose que esta tendencia se está dando más en países islámicos. Y al revés, en otros sitios, como Vietnam, también se está avanzando hacia la mejora; allí ya se permite la actividad en los seminarios, lo cual es un gran paso en comparación a la anterior persecución”. El responsable de AIN-España insistió en que la principal función de este estudio es la de “denunciar en voz alta los ataques sufridos”, tratando de “concienciar a la sociedad” y de “influir en los gobernantes” con responsabilidades para buscar posibles soluciones.

Islam complejo

Justo Lacunza centró su intervención en un contexto muy conocido por él, el de los países islámicos. Dejó claro, en primer lugar, que éste es un ámbito muy complejo y plural, “capaz de producir grandes tsunamis de dolor, a la vez que también equivale a cultura, sensibilidad, ganas de vivir y derechos humanos”. Todo depende del país en cuestión al que se haga referencia. A lo largo de su análisis, lamentó los prejuicios existentes en nuestras sociedades cada vez que se aborda la cuestión islámica. “Geográficamente, muchos identifican musulmán y árabe, cuando la realidad dice que sólo un 16% de los musulmanes son de países árabes, siendo la inmensa mayoría de África y Asia”, aclaró. Del mismo modo, hizo especial hincapié en diferenciar “la gran diversidad de leyes y constituciones con las que cuentan, variando unas y otras según qué países”. A modo de ejemplo, comparó la situación existente en varios de ellos: “En Indonesia y Azerbayán no hay religión de Estado. En Malasia lo es el islam, pero hay libertad religiosa. En Irán hay libertad formal, pero sólo para los ciudadanos iraníes, no para los extranjeros. Y en otros, como Kenia, la ley islámica permanece vigente, contraviniendo lo expuesto en las leyes del país, que en principio están en contra de cosas como la poligamia”. 

También entró a valorar “el desafío mundial” que el islam más radical mantiene ante el resto del mundo: “En 1988, Al Quaeda ya habló de emprender una ‘guerra contra los americanos, los judíos y los cruzados’, que es como ellos llaman a los cristianos. Eso sigue vigente hoy, en 2008. Y no podemos callar ante la injusticia. No es ir contra el islam, al revés, pues le hacemos un bien diciendo las cosas como son”. 

En cuanto al informe en sí, éste ofrece datos muy clarividentes sobre países que están hoy de actualidad por su virulencia contra los cristianos. Es el caso de la India (donde ya son más de 80 los martirizados por su fe; a propósito, el cardenal Tauran acaba de enviar un mensaje a los hindúes donde les propone trabajar por la no violencia junto a los cristianos, frente a los que manipulan la religión), China (durante los Juegos Olímpicos se detuvieron a varios de sus obispos, los cuales, por cierto, han tenido prohibida su asistencia al Sínodo de la Palabra que acaba de concluir en Roma), Irak (en los últimos días ha habido 14 muertos en Mosul, huyendo 10.000 cristianos de allí), Arabia Saudí (que se califica como estado “islámico integrista”)…

En el nº 2.634 de Vida Nueva.

Compartir