Una india, entre los cuatro santos canonizados por el Papa

Alfonsa de la Inmaculada Concepción es la primera santa para los cristianos perseguidos en la India

(Vida Nueva) Benedicto XVI canonizó este domingo, 12 de octubre, a cuatro nuevos santos: el italiano Gaetano Errico; la misionera suiza en Ecuador y Colombia María Bernarda Bütler; la ecuatoriana Narcisa de Jesús; y la india Alfonsa de la Inmaculada Concepción, la primera persona originaria de ese país que sube a los altares. “Que su ejemplo nos dé valentía, que sus enseñanzas nos orienten y conforten, que su intercesión nos sostenga en las fatigas cotidianas para que también nosotros podamos llegar un día a compartir con ellos y con todos los santos, la gloria del banquete eterno en el Jerusalén celeste”, dijo el Papa al concluir la homilía ante más de 40.000 personas en la Plaza de San Pedro.

Durante la presentación de cada uno de los canonizados, al llegar a la figura de santa Alfonsa (1910-1946), el Santo Padre habló en inglés a los fieles venidos de la India y destacó la fortaleza con que la religiosa, cuyo nombre de pila era Anna Muttathupadathu, afrontó todos los sufrimientos de su vida uniéndolos a la Cruz del Señor. Perteneciente a la Congregación de las Clarisas de la Tercera Orden de San Francisco, falleció con tan sólo 35 años. “Sus virtudes heroicas de paciencia, fortaleza y perseverancia en medio de profundos sufrimientos nos recuerdan que Dios siempre ofrece la fuerza que necesitamos para superar toda prueba”, dijo el Papa al final de la celebración eucarística. Asimismo, pidió a los presentes que rezaran por los compatriotas de santa Alfonsa: “Mientras los fieles cristianos de India dan gracias a Dios por su primera hija presentada a la veneración pública, quiero asegurarles mis oraciones durante estos momentos difíciles”.

Según han informado los obispos indios presentes en el Sínodo, al menos 80 cristianos han sido asesinados desde que se desencadenó la persecución religiosa en el país (en el mes de agosto), particularmente en el Estado de Orissa. Benedicto XVI encomendó “al cuidado providencial de Dios todopoderoso a todos los que luchan por la paz y la reconciliación”. Asimismo, pidió “a los autores de la violencia que renuncien a estos actos y se unan a sus hermanos y hermanas en la construcción de una civilización del amor”.

Una de las delegaciones más numerosas fue la ecuatoriana, con unas 10.000 personas, que acudió para presenciar la canonización de su compatriota, santa Narcisita (1832-1869), laica que se dedicó a la costura y al apostolado como catequista. Otro de los canonizados, san Gaetano Errico (1791-1860), fue el fundador de la congregación de los Misioneros de los Sagrados Corazones de Jesús y de María, cuya entrega en la administración del sacramento de la Reconciliación fue destacada por el Papa. Entre los cuatro santos encontramos también a una misionera: santa María Bernarda (1848-1924), que nació en Suiza y murió en Colombia, uno de los países, junto con Ecuador, en los que transmitió su amor a la Eucaristía.

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