“El terrorismo acaba por destruir la dignidad sagrada del hombre”

El Episcopado condena los atentados de ETA del fin de semana

(Vida Nueva) En tan sólo 24 horas, la banda terrorista ETA ha hecho estallar tres artefactos en nuestro país. El último de ellos -en la madrugada de este lunes 22 de septiembre- se ha cobrado la vida de un brigada del Ejército en la localidad cántabra de Santoña y ha dejado herido a un suboficial. Luis Conde de la Cruz, de 46 años, fallecía tras tras la explosión de un coche bomba cerca del Patronato Militar Virgen del Puerto, una academia de formación de miembros del Ejército en la que residía. El Obispo de Santander, Vicente Jiménez Zamora, junto con toda la comunidad diocesana, ha expresado a través de una nota su “profundo dolor y su más absoluta y total condena de este criminal acto de terrorismo, que es intrínsecamente perverso y vulnera gravemente el derecho a la vida y a la libertad“.

En el escrito, el prelado muestra su cercanía a las familias de Luis Conde de la Cruz y de todos los heridos. Les alienta “con el consuelo de la esperanza cristiana, a la vez que eleva oraciones por el eterno descanso del fallecido y el pronto restablecimiento de los heridos”. También manifiesta su apoyo a las autoridades públicas, así como los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado “en el laudable trabajo al servicio de la convivencia en paz y en justicia de toda la sociedad”.

Por último, en la nota el obispo “invita a toda la comunidad diocesana a perseverar en la oración a Dios para que cese definitivamente el terrorismo y todo germen de violencia que acaba por destruir la dignidad sagrada del hombre”.

Los otros dos atentados del fin de semana se produjeron en Vitoria y en Ondarroa (Vizcaya), dejando este último varios heridos. El obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, también ha manifestado en una nota su “condena e indignación” por los actos terroristas. “La fe, la esperanza y el amor cristianos nos sostienen también para continuar con firme decisión, uniendo todos nuestros esfuerzos cada uno desde su propia responsabilidad personal y social, y con una inquebrantable perseverancia. La desaparición de ETA dignificará éticamente a nuestra sociedad”, añade el prelado en su comunicado.

Blázquez lanza, por último, una pregunta y un reto: “¿Cómo es posible que desde hace 40 años la organización terrorista haya continuado matando, extorsionando, amenazando, sembrando dolor y muerte? La apuesta clara por la deslegitimación de sus acciones, motivaciones y proyectos contribuirá eficazmente a que sea erradicada“.

Educación cristiana

El cardenal arzobispo de Madrid , Antonio María Rouco Varela, y sus obispos auxiliares, se han sumado a la condena del terrorismo de ETA, un terrorismo que, como señalan en un mensaje remitido a todos los medios de comunicación “no admite colaboración ni justificación alguna, sea del grado y del tipo que sea, explícita o implícita, sociopolítica o cultural; y, por supuesto, ninguna de naturaleza ética y moral”. Alientan, por otra parte, a toda la sociedad a tener en cuenta que “solamente estaremos en condiciones de eliminar las raíces del terrorismo si nos proponemos sin tardanzas ni vacilaciones la regeneración moral y la atención a los niños y jóvenes con una educación cristiana que les conduzca al encuentro con el Dios vivo, que es Amor y plenitud del hombre”.

La Conferencia Episcopal Española también ha reiterado su “firme condena del terrorismo”, cuya calificación negativa hacen extensiva “a las acciones u omisiones de todos aquellos que, sin intervenir directamente en la comisión de atentados, los hacen posibles, como a quienes forman parte de los comandos informativos o de su organización, encubren a los terroristas o colaboran con ellos; a quienes justifican teóricamente sus acciones o verbalmente las aprueban”. Al mismo tiempo, quieren hacer llegar a la familia del militar fallecido y a los familiares de los heridos “su cercanía y su más sincera condolencia”.

A lo largo de la jornada de este lunes, se han sucedido los mensajes de condena por los actos terroristas del fin de semana, así como de condolencia con la familia del militar fallecido, Luis Conde, quien estaba destinado como brigada en la Academia de Artillería de Segovia. El obispo de la diócesis segoviana, Ángel Rubio Castro, ha sido otro de los prelados que se ha mostrado “profundamente conmovido” por el atentado de Santoña y ha querido unirse al dolor de las víctimas con la oración, “especialmente en este Novenario de la Virgen de la Fuencisla, que todos los segovianos estamos celebrando”.

Compartir